El sentido de pertenencia es fundamental en la infancia, es la conexión emocional que experimentan al formar parte de una comunidad, organización o lugar. Es un aspecto esencial de su experiencia que influye en su desarrollo y crecimiento. Cultivar este sentimiento de conexión puede contribuir significativamente a el bienestar y desarrollo en comunidad, así los niños y las niñas entienden, valoran, cuidan y respetan su habitat. A su vez, trae beneficios en su bienestar emocional, su salud mental, las relaciones interpersonales, su identidad cultural entre otros aspectos.
1. El bienestar emocional. Ser parte de algo más grande brinda una sensación de identidad y propósito. Esto puede aumentar la autoestima y satisfacción personal, al ser valorados y aceptados en el entorno. Ayuda a superar la soledad y los desafíos emocionales.
2. La salud mental. La integración en un grupo actua como un amortiguador contra el estrés, la ansiedad y la depresión. La sensación de apoyo social en una comunidad afianza un espacio seguro para expresar emociones y compartir experiencias.
3. Las relaciones interpersonales: . Al ser parte de un grupo se desarrolla un vínculo emocional con sus miembros, son amistades sólidas, colaboraciones efectivas y redes de apoyo mutuo.
4. Identidad cultural: Está relacionado con la identidad cultural y nacional, en sus raíces, tradiciones y costumbres fortalece la autoestima y enriquecer la comprensión del mundo, trasciende las diferencias individuales.
Milton Marcelo Puente
Arquitecto