miércoles, 14 de octubre de 2020

ESPACIO PÚBLICO Y LA INFANCIA

La ciudad tiene en sus espacios públicos la oportunidad de integrar e incluir diversas realidades en la población, la vida urbana que se revela en estos lugares ayuda a la convivencia en contextos cada vez más complejos y con problemáticas latentes. Para la niñez son necesarios, hasta vitales para su desarrollo personal y para su relación con la sociedad. La ciudad debe organizar sus espacios públicos con una estructura bien organizada, accesible para niños y niñas, así mismo, con una dinámica abierta, libre y con amplias posibilidades de expresión. 

¿Cómo influye el espacio público en el desarrollo de la infancia? 

¿Qué escalas de apropiación asume la niñez en los espacios públicos? 

El espacio público parte del desarrollo en la infancia.

- En su crecimiento personal: afianzamiento de sus sentidos y sus emociones ampliando su creatividad e imaginación, su intelecto. Su desarrollo corporal pues en las posibilidades que le brindan los espacios públicos niñas y niños corren, saltan, trepan, etc., activan algo inherente en su ser, el juego.

- En su desenvolvimiento social: se forma la ciudadanía, lo hace solidario, tolerante y amplía sus relaciones afianzando su libertad e identidad. 

Escalas de apropiación del espacio público en la niñez.

En la infancia se organiza un sistema de apropiación del espacio público en escalas consecutivas, en las facilidades que la ciudad le brinde para realizar sus juegos, el lugar se impregna en su experiencia de vida:

- La apertura a los espacios públicos se inician desde la calle, el nexo entre la casa y la ciudad en el barrio. En los dominios que tengan el niño, la niña y el grupo de amistad establece un espacio de cercanía y de vecindad.

- Los parques del barrio son espacios de acercamiento con la naturaleza, además de interactuar con las amistades, la niñez valora la importancia de la flora y la fauna.

- Las plazas de la ciudad. Cada distrito tiene espacios públicos cívicos sirven como hitos, lugares de referencia para la niñez que los identifica como ciudadanos parte de un territorio político donde habitan al lado de su familia y amigos.

Milton Marcelo Puente
Arquitecto

lunes, 5 de octubre de 2020

MOVILIDAD URBANA EN LA NIÑEZ

La ciudad establece diversos espacios interesantes y necesarios para la interacción físico-espacial y social es ahí donde se generan valiosas experiencias, niños y niñas tienen en ellos espacios que los educan y que los ayudan a construir una cultura ciudadana. Conectar estos lugares requiere de un sistema de movilidad urbana acorde a los requerimientos para su formación y desarrollo integral. Lamentablemente la ciudad constantemente da la espalda a la niñez hace cada vez más dificultoso el desplazamiento y la comunicación en el sistema de transporte y de vialidad. 

¿Qué podemos hacer para que la movilidad urbana en las ciudades sea una oportunidad de apropiación del contexto, la conformación de la identidad, el afianzamiento de un sentido de pertenencia y un lugar que protege a la infancia? 

Cultura en movilidad urbana. Educar desde la niñez en los deberes y derechos que tienen frente a la ciudad, en el uso solidario y correcto de los sistemas de desplazamiento. La familia, la escuela y la ciudad pueden impartir cultura urbana en movilidad. 

Políticas de movilidad urbana. El estado en sus diversas estancias está obligadas a proveer y adecuar un flujo coherente y seguro pensando en la niñez. Desde la casa, el barrio y la ciudad en su totalidad deben cuidar la normal circulación de niñas y niños. 

Sistema de movilidad urbana. La adecuación social del sistema de transporte en la actualidad es una necesidad para el normal desarrollo de la niñez en la ciudad, orientar y exigir que las ciudades se movilicen en la estructura conocida de movilidad sostenible: privilegio al peatón (niño y niña), el uso de bicicletas, un apropiado transporte público que cuide a la infancia. Así mismo el sistema vial es un medio de comunicación a través de la señalética, la misma infraestructura educa. 

La planificación de la movilidad urbana. La ciudad sigue en un proceso imparable de crecimiento, en paralelo la movilidad urbana amplía sus influencias, ambos requieren una planificación pensando en el bienestar de la infancia, acciones a corto, mediano y largo plazo adecuando los sistemas de transporte y vial con un sentido humano, al considerar a la niñez se considera a toda la población. 

Milton Marcelo Puente
Arquitecto

lunes, 28 de septiembre de 2020

EL PAISAJE PARA LA INFANCIA

El contexto para cada niño y niña establece un proceso perceptual, activa sus sentidos para comprender los componentes físico – espaciales de donde vive, estas experiencias organizan imágenes positivas o negativas que los acercan o los alejan. Estas imágenes que perciben enseñan, educan y forman a la niñez, al final se consolida en un sistema de ideas y acciones sobre su realidad, necesario para su crecimiento sostenido en una relación armoniosa con el lugar donde vive y juega. 

¿Cómo influencia el paisaje en el desarrollo de capacidades en la niñez? 

- Paisaje físico. Lo construido en el paso de los años enseña a los niños, existen capas históricas que generan conocimiento y emociones que los cobijan, fundamenta su sentido de pertinencia con el lugar que habita. 

- Paisaje cultural. Cada grupo humano tiene un cumulo de vivencias, mitos, ritos, historias, entre otros que conforman un legado distribuido en diferentes espacios, estos antecedentes ayudan a fortalecer la identidad de la niñez 

- Paisaje urbano. La ciudad en su estructura y dinámica tiene mucho por ofrecer, pensemos, la ciudad qué ofrece a la infancia desde el barrio y en toda su amplitud, la infancia tiene experiencias gratas en su interacción impulsa su creatividad e imaginación. 

- Paisaje natural. El vínculo de la niñez con la naturaleza es vital, la interacción con la fauna y la flora no solo genera salud, lo hace parte de un ecosistema vivo, afina su sensibilidad con su entorno y en su relación hace que lo cuide. 

De lo señalado podemos valorar la importancia de construir paisajes apropiados para la niñez, esto ayuda a su desarrollo integral y lo más importante educa a los ciudadanos del mañana. 


Milton Marcelo Puente 
Arquitecto

martes, 22 de septiembre de 2020

TERRITORIO Y NIÑEZ: ESCALAS DE APREHENSIÓN

Si el territorio es el espacio que toda persona habita y posee, para la niñez se establecen en diferentes escalas, según la experiencia y la forma de aprehensión se van a organizar lugares propicios para crecer y aprender de manera sostenida. Vital para que niñas y niños desenvuelvan su creatividad, su inteligencia y sus capacidades, desarrollando así un ciudadano consciente en el futuro.

¿Cómo logramos que la niñez se apropie de su territorio? 

- La casa, primer territorio de identificación emocional y cognitivo donde el juego organiza espacios libres, íntimos y propios. 

- El barrio, el territorio más cercano de interacción social a través de los amigos y los vecinos se afianza el sentido de comunidad. 

- El distrito el inicio en el reconocimiento del territorio jurídico, la ciudad se abre a múltiples vivencias fomentando una apertura mental de conocimiento a través de caminatas donde niños y niñas deben identificar hitos para su normal desenvolvimiento y circulación como son calles, espacios públicos y equipamientos. 

- La provincia, la región y el país, los macro territorios se valoran desde los viajes, incentiva la identidad y valora su pertenencia en su nación. En esta etapa los gobernantes toman un papel protagónico, deben acondicionar sus jurisdicciones para la niñez, para la población en general. 

Para ampliar la mente de los niños y las niñas es necesario que interactúe y conozca su territorio.


Milton Marcelo Puente
Arquitecto